El colectivo estudiantil considera que se ha instaurado una violencia institucional que pretende derribar la resistencia de la ciudadanía ante los abusos de una casta privilegiada.
La Asamblea del Movimiento Estudiantil Canario (AMEC) condena de forma tajante la detención del activista Roberto Mesa mientras participaba en una concentración pacífica en Santa Cruz de Tenerife. Este arresto no es sino otra gota que se suma al ya abundante caudal de la represión que sufren todas las organizaciones sociales en las Islas y en España. Este colectivo estudiantil desea recordar que hace también muy poco tiempo la policía detuvo y agredió, con extrema violencia, al sindicalista Alberto Rodríguez por su participación en la pasada huelga general.
A estos hechos hay que sumarle la extradición del ciudadano uruguayo José Morales, que fue arrestado por participar en una manifestación contra las prospecciones petrolíferas en las Islas, durante una visita del ministro José Manuel Soria a Canarias. Este “destierro”, más propio de un sistema dictatorial, que de uno que pretende ser democrático, ha causado graves perjuicios a este compañero, dado que lo aleja definitivamente de parte de su familia más cercana.
AMEC se opondrá con todas sus fuerzas a este tipo de violencia institucional, dado que emana de la propia Administración Pública, cuyos gestores consideran que el enemigo a batir es el ciudadano y su oposición a los abusos de una casta política muy bien identificada.